Hace mucho tiempo que no me dedicaba a escribir en este blog, pero el otro día conoci la figura de un personaje que bien merece una entrada y ese es Gabriel de Castilla.
Me averguenza reconocerlo pero no conocía este personaje y tiene más delito pues es da la misma tierra que yo, Palencia. Y más si tenemos en cuenta su importancia pues esta considerado como la primera persona en vislumbrar la Antártida.
Pero empecemos, Gabriel de Castilla nació en Palencia en 1570, y en aquella época como muchos de sus congeneres decidió emprender la marcha a las americas. En el caso de Gabriel el destino hizo que recalara en el virreinato de Perú unos cincuenta años después de que Pizarro acabase con Atahualpa y su imperio Inca.
En marzo de 1603 el virrey Luis de Velasco y Castilla (otro palentino de Carrión de los Condes) que era su primo le encomendo la misión de reprimir las incursiones holandesas en el zona sur del virreinato.
Para ello el bueno de Gabriel dispuso de 3 barcos: el Jesus María, el Nuestra Señora de la visitación y el Nuestra señora de las Mercedes (nota: no confundir con el famoso barco expoliado por Odissey que es del s. XIX y este es del s.XVII)
"muy alta y montañoasa, cubierta de nieve, como el país de Noruega, toda blanca, que parecía extenderse hasta las islas Salomón"
Otra declaración de la expedición afirma que más alla en la latitud 64º existia una gran masa de tierra. Estas declaraciones, junto con otros documentos demuestran que estamos ante el descubridor de la antartida, el último continente en ser descubierto. Y por aunque como Colón no tenía mucha idea de donde se encontraba. Sin embargo no le resta valor a su historia y merece que sea recordada. Actualmente España tiene una base en la Antartida con su nombre.
No he podido encontrar mucha más información sobre esta persona tan solo que Gabriel de Castilla falleció finalmente en 1620 en Lima (Perú).
Desde aqui mi homenaje a este palentino del que no sabía nada, y del que parece vergonzoso la falta de reconocimiento entre paisanos e instituciones. Es lamentable que siquiera en Palencia no exista una calle o plaza con su nombre. Una vez más se repite uno de los dramas de España y es la de olvidar a sus grandes figuras.
La ambición me lleva no solo a donde ningún hombre ha ido antes, sino a donde creo que es imposible que un hombre vaya
James Cook, explorador britanico